lunes, 7 de abril de 2014

La luz

Casi todo nuestro conocimiento sobre el Universo procede del estudio de la luz emitida o reflejada por los objetos en el espacio. Excluyendo unas pocas excepciones, los astrónomos tienen que limitarse a detectar y analizar la débil luz procedente de objetos distantes para estudiar el cosmos. Este hecho es aún más impresionante cuando consideramos la inmensidad del Universo. Muchos de estos fotones de luz tienen que viajar billones de años luz para llegar a nuestros telescopios. La astronomía es una ciencia donde no podemos recolectar muestras o estudiar objetos en un laboratorio o entrar fisicamente en un sistema para estudiarle en detalle.
 
Afortunadamente, la luz lleva mucha información. Detectando y analizando la luz emitida por un objeto celeste, los astrónomos pueden calcular su distancia, movimiento, temperatura, densidad y composición química. Y dado que la luz procedente de un objeto tarda un tiempo en llegar hasta nosotros, podemos aprender cosas sobre la historia y evolución del Universo. Cuando recibimos luz de un objeto en el espacio, estamos de hecho haciendo un poco de "arqueología", examinando como se veían los objetos cuando esos fotones de luz fueron emitidos. Cuando los astrónomos estudian una galaxia que se encuentra a 200 millones de años luz, están examinando como era la galaxia hace 200 millones de años. Para ver como es ahora tendríamos que esperar otros 200 millones de años. Nosotros vemos el Sol según era hace 8.3 minutos.
 

Es natural pensar que la luz es la luz visible que detectan nuestros ojos. Sin embargo, este es sólo un tipo de luz. El rango entero de la luz, que incluye los colores del arcoiris que normalmente vemos, se llama espectro electromagnético. El espectro electromagnético incluye los rayos gamma, los rayos-x, el ultravioleta, el visible, el infrarrojo, las microondas y las ondas radio. La única diferencia entre estos diferentes tipos de radiación es su longitud de onda o su frecuencia. La longitud de onda se incrementa, y la frecuencia disminuye, de las rayos gamma a las onda radio.
 
Cada tipo de radiación (o luz) nos proporciona información única. Para obtener un conocimiento completo del Universo necesitamos observarlo con toda su luz, usando todo el rango del espectro electromagnético. El desarrollo tecnológico de los últimos 70 años ha permitido la fabricación de detectores electrónicos capaces de ver luz que es invisible a nuestros ojos. Además, ahora podemos poner telescopios en satélites, en aviones y en globos aerostáticos volando a gran altura, para evitar el efectro "oscurecedor" de la atmósfera de la Tierra. Esto ha producido una revolución en nuestro conocimiento del Univero.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario